Lo primero que debemos tener en cuenta a la hora de operar mercados laterales es que no todos los activos son apropiados para ello. En el mercado de divisas, por ejemplo, todos los pares principales, es decir, aquellos que tienen al Dólar Americano como uno de los pares negociados, están demasiado expuestos a cambios bruscos en el movimiento de los precios y siempre hay demasiados acontecimientos que le pueden afectar de una manera considerable, haciendo la operativa de rangos demasiado complicada en estas ocasiones. No podemos olvidar que el Dólar Americano es, por excelencia, la moneda más negociada en el mundo, con más del 80% de las transacciones que se realizan diariamente.
Por ese mismo motivo, como lo que buscamos en esta operativa es un movimiento constante pero lo suficientemente tranquilo como para permanecer delimitado entre ciertos rangos de precio, siempre intentaremos evitar los «Mayors» o pares principales (Eur/Usd, Aud/Usd, Gbp/Usd, Usd/Chf, Usd/Cad, Usd/Jpy) y buscaremos los cruces que puedan adaptarse mejor a las condiciones que necesitamos.
Del mismo modo, no todos los cruces suelen comportarse de manera tranquila. Existen los cruces de alto riesgo, caracterizados por sus altas volatilidades, que los hace más adecuados para mercados en tendencia que para estrategias en rango.
Estos cruces suelen coincidir con aquellos pares de divisas que tienen altos diferenciales en sus tasas de interés. Por eso, conviene tener presente los diversos diferenciales y asegurarnos de operar aquellos pares que se adecuen a nuestras condiciones óptimas de mercado.
Además, evitaremos, en la medida de lo posible, momentos de acontecimientos fundamentales y si fuera necesario, los momentos en los que se solapan las diferentes sesiones (europea y americana, americana y asiática, o asiática y europea) donde se concentra la mayor parte de volumen y volatilidad que podrían afectar a nuestra operativa.
Una vez establecido el tipo de mercado apropiado para nuestra estrategia para operar en rango, lo primero que debemos hacer es descartar aquellos mercados que muestren una tendencia lo suficientemente sana, pues no nos resultará nada rentable este sistema en mercados tendenciales.
Una de las mejores maneras de comprobar la salud de las tendencias es por medio de las líneas de tendencia, de las cimas y de los valles. Si las líneas de tendencia aguantan las ondulaciones del precio, y las resistencias son rotas en mercados alcistas, o los soportes en mercados bajistas, va a ser clara señal de fortaleza a la que no podremos enfrentarnos.
Así pues, operaremos aquellos cruces cuyos precios estén rompiendo líneas de tendencia y al mismo tiempo permanezcan rebotando en zonas de soporte o resistencia, buscando que entren en periodos de debilidad y permanezcan durante cierto tiempo sin ninguna dirección definida.
A la hora de buscar entradas y salidas, nos guiaremos por varios indicadores. Por un lado, el Stochastic, cuyos fundamentos y utilidades hemos explicado en este artículo, y por otro, el RSI o Relative Strenght Index, que también hemos explicado en este otro artículo.
La combinación de estos dos indicadores nos ayudarán a filtrar un poquito mejor nuestras entradas.
Tanto el Stochastic como el RSI son indicadores que, combinados correctamente, pueden funcionan muy bien en mercados laterales. En el siguiente video explicamos la mejor manera de aprovechar las zonas de sobrecompra y sobreventa de ambos y, gracias a las medias alisadas de uno y las medias más rápidas del otro, nos permitirá aplicar una estrategia para mercados laterales mucho más efectiva.
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